Perros con grandes ventajas
Los bichones malteses son un tipo de perro muy codiciado desde épocas antiguas. Tienen un tamaño pequeño, perfecto para vivir en pisos de dimensiones limitadas, son cariñosos, pacientes y se adaptan muy bien a cualquier plan familiar. Aunque prefieren estar en casa, también pueden salir a dar paseos por el campo. Son listos, capaces de aprender trucos fácilmente, distinguir palabras y recordar caminos.
Orígenes antiguos
En los últimos 30 años vivimos un boom de nuevos cruces de perros. Sin embargo, el bichón maltés es una de las razas con más historia, pues se cree que su origen se remonta al año 1000 antes de Cristo. Las primeras representaciones de este perro se fechan en el antiguo Egipto, cuando se cree que llegó esta raza importada de Sicilia.
Un perro pequeño pero cazador
Nadie diría a día de hoy que el bichón maltés fue un perro cazador, pero ese fue su primer cometido: en la antigua Roma fue el encargado de cazar ratones en la casa. Siempre fue un perro doméstico, nunca se le ha asociado con las granjas o la caza mayor. Se le denominó “Perro de las patricias” porque durante la antigua Roma fue el perro predilecto de las mujeres de los patricios para cuidar la casa y hacer compañía a la familia.
Se le denomina también el “perro gato”
Físicamente es, si lugar a dudas, un perro. Pero su temperamento hogareño y desconfiado con los extraños a veces podría parecer más bien como un gato, pues no demanda demasiadas salidas al exterior, no aprecia el ejercicio físico y le gusta deambular por la casa sin ninguna pretensión de abandonar sus muros. Aun así, su temperamento es muy dulce, cariñoso y juguetón, así que en este sentido no tiene nada que ver con la idea clásica que tenemos de los gatos.
A veces es confundido con un 'westy' o un caniche
Hay otras dos razas de perro con las que el bichón maltés es confundido de forma usual. Una es la raza westy (West Highland white terrier), que tiene su origen en Escocia y que se caracteriza por tener las orejas altas y en punta y el rabo largo y grueso. Sin embargo, el bichón tiene las orejas caídas hacia delante, y el rabo muy fino y formando una espiral. Los caniches también guardan cierta similitud con los bichones, pero tienen las patas mucho más altas, las orejas más caídas y largas y la cola más corta y recta.
Es una raza hipoalergénica
De entre todas las razas de perro, el bichón maltés es una de las que menos problemas de alergia presenta para los humanos. El tipo de “cabellos” de su manto apenas sea cae, y no dispone de subcapa, por lo que las personas con alergia a los perros no suelen presentar problemas con esta raza. Aun así, cómo es un perro de gran pelaje, cuando lo tiene largo es recomendable asearlo y cortarlo de forma frecuente para evitar problemas a los alérgicos.
Es muy importante que socialice desde pequeño
Dado que se trata de una raza poco dada a salir de casa, si cedemos ante sus deseos podemos provocar un problema de socialización importante. El bichón maltés es por naturaleza desconfiado de los extraños y de otros perros, y cuanto menos hábito tiene de convivir y visitar a otras personas, más rechazo sentirá y podrá desarrollar un insistente ladrido ante otros perros o rehusar a ser observado o acariciado por extraños. Sin embargo, es común que se lleve muy bien con otros bichones, de su propio sexo como del contrario.
Los ojos son su talón de Aquiles
Es un perro que precisa de pocos cuidados. Sin embargo, tiende padecer problemas oculares, en concreto conjuntivitis. Esto se debe a que el pelo del flequillo que le cae en los ojos, si está sucio, puede introducir una infección en el globo ocular. Pero, no es recomendable cortárselo o sujetárselo con una pinza, pues el pelo del flequillo del bichón hace las veces de protector de los ojos contra sustancias que puedan caer en sus ojos, pues ten en cuenta que es un perro de pequeño tamaño y de patas cortas, y cuando olisquea permanece muy bajo sobre el suelo.
Muy de moda en los años 50
El perro de Marilyn Monroe era un bichón maltés, y fue un regalo personal de Frank Sinatra. Esto hizo correr la fiebre por esta raza, que se popularizó extraordinariamente en Estados Unidos en los años 50 y 60. Además, también es célebre ya el perrito de Elvis Presley, un bichón maltés llamado Foxhugh.
Barbra Streisand no tenía un bichón, aunque se pareciera
Existe cierta confusión con la perra de Barbra Streisand, que se llamaba Samantha, y a la que Streisand quería tanto que decidió clonarla cuando esta falleció. Sin embargo, no era un bichón maltés, sino un cotón de tulear, una raza casi idéntica, pero de diferente procedencia.
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